Especial.-  El Cuerpo de Bomberos del estado Miranda cuenta entre sus atribuciones capacitar a las organizaciones de base del Poder Popular en cuanto a prevención o mitigación de riesgos, así como prepararlas para la protección y actuación adecuada en casos de emergencias. En tal sentido, desde hace más de 50 años, se ha dedicado a educar a los niños mirandinos en materia de prevención, atención de emergencias y comportamiento ciudadano a través de la denominada Brigada Generalísimo Francisco de Miranda.

 La misma está formada por niños, niñas y adolescentes, con edades comprendidas entre los 7 y 17 años, que se reúnen todos los sábados para aprender sobre orden cerrado, historia de los bomberos y de las brigadas, prevención de eventos adversos, actuación ante una emergencia, equipos bomberiles, protocolo bomberil y acciones cívicas, entre otros temas.

Actualmente en el estado existen 11 brigadas, compuestas por alrededor de 800 niños y jóvenes, las cuales tienen sus sedes en las estaciones de Bomberos de Los Teques, Cúa, Santa Teresa, Santa Lucía, Ocumare, Guarenas, Guatire, Caucagua, Higuerote, San José de Barlovento y Playa Pintada.

Motivo de orgullo y semillero de bomberos

“Formar parte de la Brigada de Niños, Niñas y Adolescentes Generalísimo Francisco de Miranda del Cuerpo de Bomberos del estado Miranda es un honor y un sueño hecho realidad”, expresaron los brigadier Tabatha Tovar (15), Jennifer Camacho (15) y Diego Tovar (14) quienes, con solo 6 años de permanencia en la agrupación de la estación de Playa Pintada, fueron los primeros brigadistas en recibir el Botón “Honor al Mérito” en su única clase por haber realizado un hecho heroico.

Con verbo pausado y seguro, los jóvenes asumen el evento en el que salvaron la vida de un niño de 5 años de edad como un hecho fortuito que los ubicó en el lugar y momento preciso para poner en práctica los conocimientos de rescate y salvamento, técnicas de reanimación cardiopulmonar, primeros auxilios básicos, inmovilización y traslado de lesionados aprendidos dentro de la Brigada y que les valió la más alta distinción que otorgan los Bomberos de Miranda a sus efectivos.

Con aspiraciones a ser profesional de la salud como médico, además de proseguir en sus acciones como bombero voluntario, la hoy brigadier Tabatha Tovar sostiene con orgullo que “el ser bombero es un verdadero orgullo. Es una carrera que me gusta mucho, más por el hecho de ser hija de bombero y ver a diario cuando llegaba en los camiones, con el uniforme. Querer ser parte de ese mundo tan apasionado es algo que está en la sangre”.

Al ser consultada sobre lo que le aporta a su vida el pertenecer a las brigadas de “bomberitos”, Tabatha sostiene que “las brigadas son una ventana abierta para que los niños, niñas y adolescentes estén fuera de las calles. Un lugar donde cada sábado podemos aprender un oficio, una profesión y obtener una experiencia de vida positiva”.

Asimismo, la brigadier Jennifer Camacho, quien aspira en un futuro ser profesional de la odontología y convertirse en bombera voluntaria, explica que la importancia de todo este aprendizaje radica “en el poder ser realmente útiles a los demás; tal y como lo fuimos para ese niño que rescatamos del fondo de una piscina en una posada. Salvar una vida no se compara con nada”.

Camacho relató detalladamente el incidente explicando que, gracias a la coordinación y voz de mando de su compañera Tabatha, tras el extravío del infante, fue posible dar con su ubicación en el fondo de la pileta.

“El niño ya se encontraba en estado de lividez y con los labios morados cuando lo encontramos, así que procedimos a aplicar el protocolo correspondiente. Mi compañero Diego se hizo cargo de las compresiones, yo le di respiración y, entre tanto, Tabatha lideró toda la maniobra”.

Por su parte el brigadier Diego Tovar, quien desea estudiar arquitectura y formar parte de la dotación de bomberos voluntarios, se muestra orgulloso de su rol como bomberito, de su uniforme, y de todo el conocimiento adquirido a lo largo de sus 6 años de permanencia en la brigada de Playa Pintada.

“Ser bombero es una ilusión. El uniforme, el saber responder en caso de una emergencia, sentirme útil para la sociedad. Ser bomberito va mucho más allá del orden cerrado, es tener la capacidad de poder hacerle frente a cualquier eventualidad o emergencia”, dijo.

Seguir creciendo es la misión

Para los coordinadores y jefes de Brigadas la satisfacción de su trabajo radica en estar formando ciudadanos útiles a su familia y a su comunidad, así como en sembrar las semillas de los futuros Bomberos de Miranda. Para ello, en la actualidad, pretenden la ejecución de proyectos que buscan la formación de un mayor número de niños y niñas, el autofinanciamiento y el establecimiento de programas de recreación, cultura y deporte que complementen su trabajo educativo.

Sobre este particular, el Capitán (B) Yoel González Alayón, coordinador de las Brigadas de la región Barlovento, la semana pasada presentó ante la Primera Comandancia del Cuerpo de Bomberos de Miranda un grupo de propuestas que cuentan con el respaldo de las distintas asociaciones de padres y representantes del eje costero, entre las que figuran la creación de al menos tres cooperativas: textil, de transporte y de artes gráficas.

“Las mismas permitirán el autofinanciamiento de las 11 agrupaciones en lo concerniente al coste de uniformes, movilización de los niños para prácticas y actos, así como la impresión de certificados, reconocimientos y guías de trabajo”, indicó el capitán.

También buscan establecer un programa de recreación anual que incluya planes vacacionales, encuentros deportivos y entrenamiento de campo, la realización de una carrera 10K y una caminata 5K y el establecimiento de una fecha única para los actos de graduación y ascenso de los brigadistas.

En tal sentido, el Tcnel. (B) José Herrera Palma, primera autoridad del organismo de prevención y seguridad regional, se mostró interesado y dispuesto a apoyar todas estas iniciativas, “porque todo lo que redunde en beneficio de nuestros brigadistas repercute directamente en el desarrollo del pueblo mirandino y de nuestra institución”.

Es por eso que, este sábado 24 de febrero están previstos los actos a través de los cuales los Bomberos de Miranda renuevan los cuadros jerárquicos de sus brigadas y juramentan a los nuevos integrantes de estas agrupaciones, una vez finalizado su año de preparación inicial.

“Este fin de semana, nuevamente los protagonistas serán nuestros niños y niñas de Miranda. Esos pequeños que nos llenan de tanto orgullo y a quienes reconoceremos su esfuerzo y prepararse para servirle al pueblo. Es por ello que también otorgaremos condecoraciones a aquellos jovencitos que se han destacado por su disciplina, estudios, conducta, actividades deportivas, o simplemente por sus años de permanencia en nuestra institución. Es nuestra sencilla forma de alentarlos a seguir a delante construyendo un futuro bonito para nuestra región”, finalizó diciendo el comandante Herrera Palma. (Prensa Gobernación de Miranda/Bomberos)