La Gobernación de Miranda, a través del programa Abuelos de Mi Alma ofreció atención integral a 289 adultos mayores de los clubes Abuelos de Cúpira y Abuelos de Santa Cruz, ubicados en el municipio Pedro Gual, informó la coordinadora municipal de este programa de gobierno, Ana Bolívar Becerra.
«La propuesta se consolidó hace 3 años y forma parte de los planes de atención social dirigido a los adultos y adultas mayores que adelanta el gobernador de Miranda, Héctor Rodríguez», aseguró.
Explicó que los abuelos reciben desayuno, almuerzo y una merienda. Señaló que los platos ofrecidos a los comensales cumplen con los indicadores de una alimentación saludable y con el Trompo de los Alimentos.
A diario estas casas de atención al adulto mayor abren sus puertas pasada las 8 de la mañana. Desde este momento, los abuelos comienzan a socializar, entablan temas de conversaciones, juegan dominó, mientras que las féminas prefieren aprovechar el tiempo en aprender manualidades.
Con el proyecto Abuelos de Mi Alma, los adultos mayores del municipio han aprendido a elaborar piñatas, pan artesanal, muñecas de trapos. Además de practicar artes escénicas como el baile, la danza y el teatro.
«Ellos reciben ejercicios físicos pasivos, atención médica, participan en viajes recreativos, turísticos y aprenden a leer y escribir mediante la Misión Robinson.
Adelantó que para el mes de marzo prevén participar en el Encuentro Mirandino de Joropo Tuyero organizado por la Gobernación de Miranda, donde una delegación de los clubes de abuelos de esta entidad va a competir desde la Plaza Bolívar de Cúpira y será evaluado por una delegación del Ejecutivo regional.
«Me siento agradecida con el Gobernador porque nos permite a través de este programa ayuda no solo a nuestros adultos mayores, sino a niños, niñas y personas de bajos recursos con la ingesta de alimentos», señaló.
En este sentido, enfatizó que todos los adultos registrados en los club están pensionados. Invitó a los abuelos que se quieran sumar, a consignar una copia de cedula de identidad en la sede de Cúpira o Santa Cruz para formalizar su admisión.
En este sentido, Juan Lira, adulto mayor del Club de Abuelo de Cúpira, manifestó: «me siento contento en estos espacios. Aquí me entretengo, comparto y me formo. Somos una familia.»