La imagen del Niño Jesús, con los brazos abiertos, recorrió las calles de Los Teques durante la vigésima novena Romería de los Pastores del Niño Jesús, una manifestación de fe que cada año convoca a promeseros, familias y comunidades en torno a la espiritualidad y la tradición navideña, informó la secretaria de Patrimonio Cultural Inmaterial de Miranda, Mariam Martínez.

“La Romería de los Pastores del Niño Jesús es una práctica de profunda significación espiritual y comunitaria, que se salvaguarda gracias al compromiso de sus portadores y al trabajo sostenido de transmisión de saberes entre generaciones”, señaló, al destacar la participación activa de niños, niñas y jóvenes en esta celebración que forma parte del patrimonio cultural vivo del estado.

Acompañada por música tradicional y cantos, La Parranda del Niño Jesús de Los Teques, declarada Patrimonio Cultural de Venezuela, del estado Miranda y del municipio Guaicaipuro, partió desde su sede en el estacionamiento de las residencias Caracas, para visitar diversos altares comunitarios, donde los devotos elevaron oraciones y agradecimientos por favores concedidos.

El recorrido culminó en la Catedral San Felipe Neri, donde se celebró la eucaristía presidida por Monseñor Freddy Fuenmayor, al finalizar impartió la bendición a los fieles y a las imágenes del Niño Jesús presentes.

Posteriormente, en la avenida Bolívar, se dio inicio formal a la Romería con el pago de promesas y la incorporación de nuevos devotos, una jornada marcada por la presencia de practicantes de todas las edades, especialmente de los Núcleos de Iniciación y Transmisión de Saberes, que durante meses se prepararon para danzar y acompañar esta expresión del ciclo festivo navideño.

El presidente de la Asociación de los Pastores del Niño Jesús de los Teques, Jaime Arteaga, explicó que esta tradición religiosa y patrimonial, suma 85 años de vigencia, reúne portadores de la expresión, los núcleos de iniciación, músicos, feligreses y más de un centenar de pastores y pastorcitas de todas las edades, quienes demuestran su devoción al Hijo de Dios.

“Los trajes multicolores, inspirados en el arcoíris, simbolizan la presencia del Niño Jesús en los corazones de los participantes. Al finalizar la Santa Eucaristía, los pastores cumplieron su promesa con su baile tradicional frente a la Catedral, que se extendió por más de tres horas.
Las figuras coreográficas representaron ofrendas por favores recibidos, en una expresión viva de fe, gratitud y permanencia cultural”, explicó.

El gobernador del estado Miranda, Elio Serrano, promueve programas de protección para la salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial y la participación comunitaria como pilares fundamentales para la protección de la Identidad Mirandina.

Prensa Gobernación de Miranda